La innovación es, sin duda, un ítem clave en los presupuestos de cualquier empresa u organización, tanto pública como privada. Sin embargo, de acuerdo a una publicación de Harvard Business Review, los proyectos de esta categoría son reconocidos por tener una altísima tasa de fracaso. Y es que muchas veces, el foco se pone en las iniciativas erradas. Aquellas que capturan la atención, pero que no reeditan realmente lo que se invierte de forma efectiva. “Muchos proyectos terminan por perder dinero, frustrar empleados o no llegar a ninguna parte”, explica el texto. Pero agrega que, a pesar de esto, tanto los gobiernos como las corporaciones invierten millones de dólares en presupuestos para innovar.
La innovación sin dirección y sin planificación implica dejar la inversión de los recursos a la suerte. La innovación eficiente, en cambio, es la que apuesta por la transformación en beneficio de las comunidades y que se basa en el diseño estratégico.
En este sentido, es especialmente relevante que cuando se trata de innovación en el sector público, esta se haga a través de los mecanismos más eficientes y efectivos posibles: haciendo uso de las herramientas que aseguran la identificación de los desafíos y el desarrollo de las mejores soluciones de forma colaborativa y considerando a todos los actores.
El municipio de Marcovia en Honduras es un ejemplo de cómo, a través de la colaboración, es posible romper el paradigma de la innovación como una inversión que no produce retornos. A través de un modelo de innovación colaborativa que busca, a partir de un programa de entrenamiento, generar soluciones concretas a desafíos públicos, este programa instala nuevas capacidades y genera confianza entre los equipos. Gracias a esto, Marcovia se ha convertido en un referente para su país y la región.
Actualmente, es el primer municipio de Honduras que cuenta con una Unidad de Innovación dentro de la alcaldía. ¿El objetivo? Capacitar a los funcionarios públicos para convertirlos en innovadores, permitiendo que actúen en beneficio de las comunidades. Porque son ellos el vínculo directo entre el gobierno y los ciudadanos.
El plan que creó la Unidad de Innovación de Marcovia incluye, además, el desarrollo de programas de innovación colaborativa, concursos, talleres de co-creación y entrenamientos. En el caso particular de esta localidad hondureña, los focos de desarrollo de soluciones colaborativas son la migración, los servicios sociales y los desafíos medioambientales. Y para la implementación de este proyecto el municipio y los funcionarios trabajan en conjunto con Unit.
“Nuestro municipio, así como toda Honduras, cuenta con desafíos importantes para mejorar la calidad de vida de las comunidades. En Marcovia hemos decidido buscar nuevos caminos y seguir la vía de la innovación profesional y responsable para que las familias encuentren oportunidades de desarrollo en su tierra, sin necesidad de partir al extranjero”, explica el alcalde Nahun Calix, ideólogo y promotor de esta iniciativa.
Si bien se trata de una instancia inédita en este país, el proyecto ha tomado elementos de referentes internacionales, que han llevado adelante iniciativas transformadoras para la comunidad en otros países. Unit ya ha implementado este modelo en 31 municipios y en 28 instituciones públicas a nivel nacional en América Latina y esta es la primera vez que se desarrollará en Centro América.
Además de jornadas de capacitación como la desarrollada en Marcovia, Unit ofrece programas de entrenamiento para funcionarios públicos en áreas de innovación en formatos de Masterclass, jornadas de trabajo, talleres y bootcamps.
